En 2014 gracias a Umoni Studio llegó a iOS y Android un juego tan sencillo como imposible de dejar pasar: Piano Tiles, también conocido como Don’t Tap the White Tile y por una excelente razón.
El objetivo del juego es tocar la melodía de piano que más te guste a la velocidad que escojas, contra, básicamente, una sola regla: no tocar la tecla blanca.
Y esta sencilla premisa pero, al mismo tiempo, su excelente jugabilidad y música lo coronaron como el más descargado de Android ese año.